“Para mi es un honor recibir el Premio Pepe Escriche porque justamente el Festival Internacional de Cine de Morelia, que este año celebra su décima edición, no habría sido posible sin Pepe”. Daniela Michel, una de las fundadoras y directora del Festival Internacional de Cine de Morelia, que recibirá esta noche el Premio Pepe Escriche en la Gala de Clausura de la 40 edición del certamen oscense, ofreció una rueda de prensa acompañada del la Presidenta de la Fundación del Festival Internacional de Cine de Huesca.
Daniela Michel explicó que conoció a Pepe Escriche en el año 1998 en el Festival de Cine de Guadalajara. Fue entonces cuando establecieron una buena amistad. “Gracias a él conocí Huesca. Fue el primer lugar que visité en España y, además, me enamoró”, dijo.
La directora del Festival Internacional de Morelia, recordó los comienzos del festival y la ayuda que recibió de Pepe Escriche, el que fuera fundador y “alma mater” del festival de Huesca durante décadas. Michel llevaba unos años codirigiendo el festival de cine Jornadas de Cortometraje Mexicano en la Cineteca Nacional en México Distrito Federal (D.F.) y al ver cómo las jornadas de cortometraje iban creciendo, se empezó a plantear la posibilidad de trasladar el festival a Morelia (en el estado de Michoacán). “Pepe me impulsó y me dio mucho apoyo cuando le comenté la posibilidad del traslado. Fue mi gran maestro. Me hizo un diagrama de cómo tenía que organizar todo el festival. Todo lo he aprendido de él”. Además Daniela Michel reconoció que el festival tuvo un buen comienzo gracias, sobre todo a Escriche. “Creo que por todo ello, es el premio que más gusto me da recibir. Él ha sido un buen amigo”.
En cuanto a la actualidad del festival hoy en día, Michel apuntó que su objetivo “es apoyar a las generaciones jóvenes de cineastas mexicanos, aunque también tenemos un apartado para invitados internacionales”. Michel explicó que otro de sus fines es el invitar a cineastas conocidos que estén dispuestos a compartir sus experiencias.
Del cine mexicano, Michel resumió que en los años noventa se creía que “había muerto porque había muy poca producción; incluso en las escuelas de cine los profesores decían a sus alumnos que el cine del país estaba acabado”. Según ella, lo único que mantuvo vivo el ánimo creador de los cineastas fueron los cortos. “Estos últimos diez años han sido muy buenos para el cine mexicano. Hay mucha fascinación por nuestras historias y nuestra lengua. Ahora Iberoamérica está muy bien representada en los festivales y eso nos llena de satisfacción”. Según la directora del certamen mexicano, el festival ha aumentado el número de espectadores alcanzando la increíble cifra de 60.000.
Al referirse al Festival Internacional de Huesca, recalcó que el festival de Morelia y el de Huesca son hermanos. “Podría decir, sin dudarlo, que el Festival Internacional de Morelia, es hijo del festival de Huesca”.