El Festival Internacional de Cine de Huesca (España) se suma a la conmoción que ha supuesto la desaparición a los 71 años del importante cineasta, Pedro Armendáriz (México, D.F., 1940 – Nueva York, 26 de diciembre de 2011). Hijo del actor del mismo nombre de la época dorada del cine mexicano, ha sido actor, productor en su país, en Estados Unidos de América y ha recibido importantes distinciones y premios en todo el mundo. También ha presidido desde 2006 a 2010 la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas. Entre las distinciones y reconocimientos el Festival de Cine de Huesca tiene el honor de haberle concedido el Premio Luís Buñuel en el año 2006, distinción a toda su carrera artística que en estos momentos destacan casi todos los medios de comunicación, especialmente de latinoamericanos.
Jorge Sánchez Sosa, director en 2006 del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (México), dijo con respecto al Premio Luís Buñuel, que habían recibido ya entonces Kaurismaki, Jan Troell o Jerrzy Kawalerowicz que “Es un honor para México que Pedro esté en esa lista, y poner su nombre al lado de Luís Buñuel me provoca una muy fácil y rápida relación de ideas donde arribo a estos dos señores construyendo la historia del cine de mi país”.
Pedro Armendáriz dijo que se había iniciado en el mundo del cine por casualidad, dado que su carrera profesional estaba encaminada hacia la arquitectura. Eso ocurrió después de aparecer en unos cortometrajes de Arturo Ripstein. Cuando vino a Huesca a recoger el Premio Luís Buñuel dijo que “yo no experimenté la carga del peso de mi padre; en un tiempo, de chico, ni me di cuenta de que mi papá era actor porque mi ídolo entonces era Jorge Negrete, y nunca tuve ese conflicto”.
Pedro Armendáriz dejó una estela de grata presencia en Huesca que siempre se recordará con gratitud.
Pedro Armendáriz, se quejaba de que en su país se veía poco cine mexicano y que muchos actores se “van de México pero no regresan, o regresan hablando en dólares”. Él fue uno de los que se fue pero volvió. De la misma manera que ahora, tras intentar superar su enfermedad en Nueva York, vuelve definitivamente a su país para descansar en paz.