LA ACTRIZ Y DIRECTORA LETICIA DOLERA RECIBE EL PREMIO CIUDAD DE HUESCA EN LA JORNADA INAUGURAL DEL 45º FESTIVAL INTERNACIONAL DE CINE DE HUESCA.
El Festival Internacional de Cine de Huesca arranca su 45ª edición distinguiendo con el Premio Ciudad de Huesca a la actriz, directora y guionista Leticia Dolera. El galardón, que busca reconocer a profesionales que sean referentes para las generaciones de jóvenes cineastas, fue recibido por Dolera “como un impulso y una caricia de cariño”, así como una muestra de que se quieren seguir viendo sus historias. Leticia no dudó en reivindicar la necesidad de que se sigan contando historias desde el punto de vista de las mujeres, así como que sigan surgiendo relatos sobre mujeres. Resaltando además los obstáculos que a día de hoy existen para estas en la industria cinematográfica. “Tengo claro que todo relato que parte de un personaje femenino o un punto de vista que culturalmente entendemos femenino es aún más costoso levantarlo a día de hoy. El panorama cinematográfico es mayoritariamente androcentrista, sin la mitad de la población nuestro relato cultura está incompleto. Debemos reflejar quienes somos y si falta la mitad de la población ese relato está cojo”. Un hecho que la propia directora del Festival, Azucena Garanto, resaltó al manifestar el orgullo que es para el Festival y para ella misma como mujer, de contar con un referente como ella que “esté peleando un lugar en la industria del cine y allanando el camino a la generación que está por venir”.
Tras Requisitos para ser una persona normal, su debut en la dirección, Dolera ha combinado sus tres facetas cinematográficas y manifestó querer que esto continúe así en el futuro: “para mí, contar historias es mi motor y lo puedo hacer desde estas tres facetas, que se comunican entre sí, y espero que siempre lo pueda hacer”. Aunque no pudo adelantar nada, Leticia Dolera confirmó estar inmensa en la escritura de su segundo largometraje. Su incursión en la dirección y el guión surgió de “la necesidad de establecer una relación más intensa con el cine, algo que me apasiona. Vivirlo desde detrás de la cámara supone un responsabilidad y sumergirte en el hecho cinematográfico de una manera más profundo. Al final dirigir es darle un punto de vista y me apetecía tomar ese riesgo, mojarme más”.
Coincidiendo con una etapa en la que no estaba trabajando tanto como actriz, Dolera se inició en ese viaje al interior del cine desde detrás de la cámara, escribiendo y rodando su primer corto Lo siento, te quiero: “Tengo grabadísimo el primer día de rodaje, con la sensación de mariposas en el estómago, lo mágico que puede ser contar historia desde detrás de la cámara, es un viaje alucinante”. Y a partir de ahí, su pasión por rodar fue creciendo, porque “cuanto más ruedas más disfrutas”. Tras dos cortometrajes más, Leticia Dolera no olvidó su pasión por rodar, “porque cuanto más ruedas más disfrutas”.
La intérprete de destacados títulos como La Novia o [REC] 3: Génesis reconoció la importancia de la existencia de festivales de cine como el de Huesca, especializados en el cortometraje: “Es maravilloso que se esté apoyando el cortometraje porque es nuestro futuro y debemos apoyarlo. Las directoras y directores de hoy son los que van a narrar las historias en el futuro”. Además, no dudó en alentar a esas nuevas generaciones a ser honestas cuando estén contando sus historias, “porque la honestidad es importante a la hora de crear”.